La técnica de la cera perdida es un procedimineto escultórico de tradición muy antigua que sirve para obtener figuras de metal ( generalmente bronce), por medio de un molde elaborado con cera de abeja. Es una técnica muy laboriosa y requiere un largo proceso de fabricación.
En primer lugar se moldea la cera hasta crear la talla deseada, después se rodea la talla con arcilla o barro bien prensado y se introduce el conjunto en un horno que derrite la cera ( la cual sale por unos orificios preparados para ese efecto) y en lugar de la cera se introduce el bronce en estado lÃquido adoptando éste la forma original del molde.
Posteriormente el barro se rompe y sale de su interior la talla deseada a la que generalmente se le dá un último tratamiento de pátina para su acabado final.
Al romperse el molde hace que cada pieza sea única y ahà radica su encanto y su valor.
La técnica de batik proviene de Indonesia y se arraigó con mucha fuerza en varios paises africanos a principios del siglo pasado.
Se trata de una técnica muy laboriosa que consiste en aplicar capas de cera mezclada con parafina sobre la tela a tratar a la vez que se van añadiendo los colores tintando la tela restante. Asà cuantos más colores tenga el dibujo final más capas de cera se tendrán que ir aplicando para cubrir la parte del dibujo que no se quiera teñir.
Trás retirar el exceso de cera se aplica una última capa final para fijar los colores y hacerlos más brillantes.
Ésta manera de teñir la tela con cera hace que el batik se pueda lavar sin peligro de que los colores y el diseños se vayan y por eso ésta técnica se utiliza para pintar ropa.
La calidad del batik se puede apreciar en su reverso donde el diseño original se aprecia perfectamente aunque con diferentes matices de colores.
Cada Batik está pintado a mano, sin moldes, y eso es lo que los hace piezas únicas.